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Ruta de los Maquis (Quesada)

Parajes singulares

, Quesada
Cómo llegar

En 2007 Quesada diseñó 11 itinerarios en el que se interpretaba y daba a conocer la época de los maquis y su presencia en la sierras de Cazorla y Segura recuperando antiguas sendas, cuevas, refugios naturales y cortijos por los que anduvieron los maquis en un intento de recuperar un capítulo de nuestra historia más reciente.

La Guerra Civil afectó de manera desigual a la provincia de Jaén, que permaneció en zona republicana hasta el 28 de marzo de 1939, prácticamente el final de la Guerra. En muchos municipios se habían puesto en práctica colectividades agrarias y algunas iniciativas que se interrumpieron bruscamente tras el final de la guerra. Al igual que sucedió durante la invasión napoleónica, estas sierras facilitaban la aparición de grupos de resistentes armados, los conocidos como maquis. Algunos de sus familiares y amigos intentaron siempre ayudarlos, con el riesgo de sufrir represalias por colaborar con la guerrilla.

En la sierra de Segura destacó Sixto García Espinosa, “el de Marchena”, que lideró un grupo que resistió hasta 1950 en cuevas próximas a la aldea de Marchena, cerca de Santiago de la Espada, del que formaron parte José Antonio Fernández, de la aldea de Miller, Juan Sáez, que fue alcalde del vecino municipio de Nerpio, y Manuel Romero, secretario del mismo ayuntamiento. Todos fueron muertos o apresados por la Guardia Civil.

Otro de los resistentes fue Pablo, el de Motril, aunque en realidad se llamaba Manuel Pérez Rubiño, que centró su actividad hasta 1952 en los términos de Cazorla, Quesada y Pozo Alcón. Otros nombres que han permanecido en la memoria colectiva son los de “Fernandillo” o el “Rojo Terrinches”, que ahora vuelen a ser conocidos gracias a las últimas investigaciones históricas y al intento de recuperar la memoria histórica del periodo inmediatamente posterior a la Guerra Civil.

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