Puente Mocho
Parajes singulares
, Beas de Segura
Puente Mocho constituye un ejemplo de arquitectura romana. Los romanos realizaron grandes construcciones civiles para garantizar las comunicaciones dentro de las distintas provincias que componían sus dominios y la movilidad de las tropas acantonadas en los distintos territorios. De hecho en muchos casos fueron los mismos legionarios los que hicieron alguna de las construcciones que hoy se conservan, sobre todo en el periodo que se conoce como el de la Pax Romana, en el que no hay problemas sucesorios entre los emperadores y hay un control efectivo en las fronteras.
El puente presenta varios arcos de medio punto apoyados sobre pilares alineados. Encima de esta estructura de arcos discurre la vía que atraviesa el río. Para su construcción empleaban sillares de piedra con los que formaban el exterior mientras que en el interior se construía con una especie de hormigón. La piedra la extraían de canteras próximas y la construcción del puente empezaba por los cimientos una vez seleccionado el terreno más firme y comprobada la resistencia del subsuelo.
El principal reto al que se enfrentaban los constructores era el de comenzar los pilares para lo que tenían que hacer una estructura de madera, impermeabilizarla y en su interior comenzar a levantar el pilar. Cuando el pilar era lo suficientemente alto, los carpinteros instalaban la armadura de madera sobre la que se construirían los arcos.
Podemos imaginar el momento de la construcción de este puente, con el sonido de los canteros trabajando los sillares, los carpinteros clavando las maderas, un bullicio de hombres moviéndose sin parar realizando distintas tareas como la colocación de los sillares o acarreando piedra hasta el puente.
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