El Hospital de los Marqueses de Linares, donde falleció el diestro Manolete, es un soberbio edificio neogótico e historicista. Hoy un museo que nos permite conocer in situ un hospital especializado en enfermedades propias del oficio minero, así como el vínculo entre salud y religión. Además, se puede admirar la dedicación por la ciudad de Linares de los propios Marqueses, cuyos restos mortales descansan en el mausoleo de la impresionante Cripta, obra del gran escultor Lorenzo Coullaut Valera. La nave central de la capilla queda abierta para albergar tanto la visita turística como cualquier acto público, convirtiéndose en una original “sala” para albergar congresos, conciertos o eventos. El museo del Hospital, se convierte en intérprete del pasado minero de la ciudad e imagen viva de la historia de Linares, dando un paso más para la configuración de Linares como “Parque minero”.